La mayoría de nosotros los occidentales, hemos transcurrido encarnaciones pasadas en oriente, donde hemos incrementado nuestro conocimiento superior, adquirido sabiduría ancestral, técnicas de meditación profunda, y hemos recibido de grandes maestros las claves de la evolución y la iluminación.
Todas estas, cuestiones que se
pueden ver perfectamente reflejadas en una carta natal kármica.
Y la pregunta generalmente es
donde esta toda esa sabiduría, si mi vida es un caos en mas de un aspecto?
Donde estuvo el gran error?
Por un lado, existe el hecho de
que hemos dejado lo aprendido espiritualmente en el plano de lo devocional, de
una forma muy abstracta, ya desde eras piscianas, y el mundo occidental, con
todo su materialismo terrenal, ha colmado toda nuestro tiempo y atención.
Y esto en que derivo? En que vivimos en un mundo aparentemente
maravilloso pero no somos felices.
Y a veces totalmente
infelices, sólo que estamos tan
ocupados siendo importantes que ni siquiera nos damos cuenta. La posición
profesional abre muchas puertas, pero nos encierra en el mundo sordo y ciego
del ego.
Por siglos, hemos pasado todo por el tamiz de la razón a cambio de negar la verdad, que radica en lo
mas profundo de nuestro corazón. Compramos y vendemos la
guerra, la pobreza, las enfermedades que cada día surgen nuevas, surgen, crean,
inventan, la muerte, los abusos al igual que abusamos de nosotros mismos.
Compramos y vendemos dogmas a cambio de una vida cómoda pero ignorante, así como principios y valores, sin ver la
necesidad de aplicarlos.
Y nuestro sistema de
creencias esta impuesto a través del
miedo. Creencias que no compartimos en el fondo del corazón, pero nos da miedo abrir los ojos, no vaya a ser que
suelto y me pasa algo, algo que este fuera de la estructura general o el status
quo, no vaya a ser que me pase algo diferente y creativo, y entonces que hago,
no?.
Y así, preferimos:
Quedarnos con una religión, no por convencimiento sino por miedo a lo que nos pueda pasar si nos salimos de ella
No dejar un trabajo por la obra social,
Mantener ese trabajo rutinario, miserable, poco remunerado pero tengo sueldo fijo
Seguir con mi esposa, con quien hace 30 años que no compartimos nada pero si la
dejo quedo solo
Seguir con mi esposo, que no lo soporto, pero me mantiene.
Y asi un gran etc, con infinidad de ejemplos.
Esto es porque aun no hemos podido aplicar esos conocimientos
ancestrales a lo cotidiano y vivimos segmentados. No hemos podido hacer el
puente y bajar todo el conocimiento del cerebro al corazón.
el sufrimiento que debemos padecer duele profundamente, pero el origen de ese
padecer fue haber pecado, y sabemos
que el único gran pecado es la
ignorancia, causa de todos los males.
Ahora, todo esto ya esta hecho, ya me equivoque y lo pague o
lo estoy pagando.
Que es lo primero que
tenemos que hacer?
Agradecer. Agradecerles a
todos los cobradores karmicos que desfilaron y aun desfilan por nuestras vidas,
a los que nos generaron cualquier tipo de daño, porque gracias a ellos, podemos
saber cuales fueron los daños que nosotros generamos a otra gente en el pasado.
Y que nosotros supimos atraer con nuestra energia, no se nos acercaron por
error. No tengo este padre, madre, jefe, compañero, pareja por las
coincidencias de la vida, porque la vecina se equivoco de timbre, yo no tenia
que estar parada en esa esquina, o porque el mundo esta en mi contra o dios me
abandono.
Gracias a ellos los cobradores kármicos, conozco mis errores y
defectos, por eso el agradecimiento debe
partir primero hacia los más allegados, padres, hermanos, parientes políticos,
y luego hacia los desconocidos y demás seres vivientes, en quienes también influyo si yo talo un árbol, maltrato un animal, cambio el curso de un río, o
algo tan cotidiano como tirar basura al piso, no les parece que estoy
influyendo negativamente en mucha gente? Si
entiendo esto, tengo que
entender que ya no puedo culpar mas a nadie. Nuestra ignorancia es tal, que
hemos llegado a culpar hasta a los planetas. Por culpa de saturno no tengo
trabajo…
Los planetas son oportunidades, son puertas de salida, para que puedas crear tu vida. No existen los
planetas malos o maléficos como los denominan con frecuencia. Cuando alguien
esta en la escuela, o la universidad, la oportunidad que tengo de ser examinada
por un docente es mi salida para el titulo o diploma de la carrera que elegí,
no me refiero al profesor de matemáticas como el maléfico Sr Rodriguez por el solo
hecho de tomarme examen, sino que es mi visa para recibirme.
Y los planetas son maestros
de dios, como enviados, para darte la oportunidad de crecer, renaciendo
en miles de cuerpos, en diferente sexo, raza o nación.
Para crecer en inteligencia, sabiduría y amor.
Por ello debes agradecer su existencia, aún cuando deben
tomarte examen y por tu ignorancia sufras.
Cambiemos la actitud.
Sintámonos actores de nuestras propias vidas, seamos parte
activa en nuestra evolución en lugar de esperar que las cosas nos sucedan.
Estemos preparados para dejar las cosas que ya no sirven y desapegarnos de las personas que cumplieron
su ciclo en nuestras vidas, amorosamente, sin odios ni resentimientos.
Observemos nuestros pensamientos. Descubramos el verdadero
poder creativo que hay en nosotros, y comprometámonos con los demás, a través
del servicio incondicional.
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